La era de los aviones con motor de pistón aún existe hoy en día, pero su época dorada fue entre los años 1920 y 1950.
Un mundo vasto y emocionante se abrió a los turistas aéreos en esta elegante y apasionante época de glamour y no poco peligro. Los aviones que lo hicieron posible eran a menudo máquinas de increíble belleza; aquí les presentamos diez de ellos:
10: Breda-Zappata BZ.308

El Breda-Zappata BZ.308, un elegante avión de pasajeros italiano de cuatro motores, voló por primera vez en 1948. Diseñado por Filippo Zappata, combinaba la elegancia de los fuselajes italianos con los potentes motores británicos en un audaz intento de la posguerra por competir en el escenario mundial de la aviación comercial de largo recorrido.
El avión presentaba un diseño elegante y aerodinámico, con una espaciosa cabina presurizada capaz de transportar a unos 50 pasajeros, lo que ofrecía una mayor comodidad en vuelos largos. Propulsado por cuatro potentes motores radiales Bristol Centaurus, el BZ.308 pretendía ofrecer un rendimiento fiable con una velocidad de crucero y un alcance decentes para rutas transcontinentales.
10: Breda-Zappata BZ.308

Aunque era un diseño prometedor, el BZ.308 se enfrentó a la dura competencia de fabricantes más consolidados y al rápido auge de los aviones a reacción, que pronto dejaron obsoletos a los aviones de pasajeros con motor de pistón como el BZ.308. Solo se fabricó y voló un avión, y el proyecto acabó abandonándose debido a las presiones financieras y del mercado.
Cabe destacar que fue el primer avión transatlántico de Italia. Hizo una breve aparición en la película de Audrey Hepburn de 1953 Vacaciones en Roma. El prototipo pasó a manos de la Fuerza Aérea Italiana, que lo utilizó para la ruta Roma-Mogadiscio hasta 1954, cuando el único ejemplar de este hermoso avión colisionó con un camión de cemento y fue abandonado en un campo de Somalia.
9: Bristol Britannia

El Bristol Britannia voló por primera vez en 1952. Diseñado como un avión turbohélice de largo alcance, encarnaba una elegancia y una delicadeza técnica dignas de admiración. Sus líneas elegantes y sus potentes motores Proteus lo convirtieron en un símbolo de la ambición aeronáutica de la posguerra.


















Add your comment